Ajedrez: el juego de aprender
Cuando el silencio se transforma
en palabra
Unos de los
paradigmas de la modernidad, con la supremacía tecno-digital, es la percepción
del tiempo. La educación debe abordar también los modos de configurar el tiempo
libre de los niños, niñas y adolescentes escolarizados, tener en cuenta el
papel socializador del ocio digital y la escasa participación del alumnado
secundario en actividades de acción social y voluntariado. Los desafíos de este
proceso se abordan en variadas propuestas socio-educativas que educan en el
desarrollo de habilidades y comprenden enseñanzas sobre los contenidos
transversales de la escuela.
Si tenemos en
cuenta que una de las constantes sociales es la importancia del grupo de
iguales, el “ajedrez educativo” es uno de los programas diseñados para que las
y los estudiantes extiendan el horario escolar, acompañados y fortalecidos en
sus trayectos, conviviendo con nuevos saberes y nuevas propuestas pedagógicas,
en un entorno lúdico e inclusivo.
Ajedrez como programa socio-educativo
La
enseñanza y práctica del ajedrez es parte de un programa anual diseñado para
estudiantes del nivel primario y secundario, fuera del horario escolar. Se
realiza en escuelas sedes que multiplican su alcance en el territorio,
acompañando y fortaleciendo los trayectos educativos, desde la convivencia con nuevos
saberes y aprendizajes.
El ajedrez educativo propicia un espacio de
recreación y aprendizaje. Este juego, deporte olímpico o arte funciona como herramienta pedagógica: desarrolla
capacidades cognitivas, reafirma el espacio lúdico,
propone situaciones de respeto al otro, toma de decisiones y despliega
habilidades de empatía, creatividad y autoconfianza. Esta forma de ampliar la mirada de nuestros estudiantes
enseña a pensar lógicamente, con criterios e incentiva el pensamiento objetivo,
abstracto, la concentración, el poder de decisión y la auto-crítica.
Se trabaja en conjunto con profesores de matemáticas para articular contenidos específicos
compartidos con la práctica del ajedrez.
Se visitan
escuelas donde se instala un ajedrez gigante en el patio del colegio, durante el
recreo, para motivar la práctica del ajedrez. Y para extenderla temporal y
territorialmente se implementó, en el mes de agosto, una plataforma web que cuenta también con recursos docentes.
Todos los eventos, encuentros y torneos se
realizan en espacios escolares con libre acceso y participación de familiares,
amigos y comunidad en general. Festivales y Simultáneas de ajedrez (con grandes
maestros nacionales), Gran Prix y Torneos
Blitz (una modalidad del ajedrez relámpago) son algunas de las actividades para
que conozcan esta actividad en otros formatos
cotidianos y modos de participación. Acercarse desde el juego a jugadores
reconocidos de primera categoría fortalece la concentración, evaluación y el
intento de superar al Maestro pone en valor su conocimiento de la actividad.
Dicen los ajedrecistas: “el que pierde es el que más aprende, con el
ajedrez siempre se gana”, y en el recreo del secundario se escucha: “en el
tablero resolvemos los conflictos” mientras se restablece el diálogo y
se igualan las posibilidades.
“Ajedrez Educativo” es
uno de los programas diseñados para las y los estudiantes fuera del horario
escolar, acompañando y fortaleciendo sus trayectos, conviviendo con nuevos
saberes y nuevas propuestas pedagógicas, en un entorno lúdico e inclusivo.
En el año 2018 este programa alcanzó por primera vez a las localidades de Chos Malal y Buta
Ranquil. Además se incorporó el tablero de juego para No videntes.
Cristina Storioni, Ministra de Educación expresó: “podemos
decir que en el año que pasó dimos el primer paso y transformamos este
encuentro silencioso de juego, pensamiento y lazo con otros, en el Primer
Encuentro Provincial de Ajedrez educativo de escuelas primarias y secundarias:
240 estudiantes multiplicarán a sus pares la rica experiencia de aprender
jugando”.
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